miércoles, septiembre 29

ENTRADA HACIA EL PARAISO


Hace varios años, me ocurrió algo que jamás olvidaré. Una aventura maravillosa, diría yo.
Todo empezó cuando un día, miré por la ventana de mi casa hacia el jardín y observé una pequeña planta que brillaba como si estuviese hecha de oro.
Yo no le di importancia y cerré la persiana.
Al cabo de una semana, la planta pasó de pequeña a gigante y yo, trepé por ella para investigar.
Cuando ya había trepado bastante, me di cuenta de que la planta seguía creciendo. Traspasó las nubes y entonces dejó de crecer. Yo subí a una nube y luego todas se colocaron como si fuesen un escalera infinita.


Subiendo los tres primeros escalones, estuve a punto de caerme al vacío; pero más tarde me acostumbré.
Aún no sabía por qué seguía subiendo, pero cuando lo averigüe, me di cuenta de que mereció la pena.
En el umbral de las escaleras, se hallaba una puerta enorme .La puerta se abrió cuando pulsé el timbre. Pasé, asustada y vi a una multitud de personas pasándoselo de muerte e inmediatamente comprendí que se trataba del Paraíso.
Al fondo, se hallaba un hombre mayor que se me acercó despacio y me preguntó susurrando si me hubiese gustado quedarme y hallar la felicidad completa y la vida eterna, es decir, el éxtasis. Yo le contesté que no, que todavía era joven y me quedaban muchas cosas por hacer en la Tierra y que contar esto sería una de ellas.
FIN
ALEXANDRA OPRESCU